ESA NOCHE SOÑASTE CONMIGO...
... Desperté y estabas sobre mí,
tus delgadas y torneadas piernas se escurrían hacia ambos lados de mi cuerpo
tu pelvis descansaba en el centro mío.
Tu piel semidesnuda cubierta por un camisón estrechisimo de algodón macerado
que solo alcanzaba a cubrir tus caderas y parte de tus piernas,
mis manos completamente extendidas
ascendían por tus muslos.
Acariciando tú suave y tersa piel de terciopelo,
al tocar el algodón del camisón con las llamas de mis dedos
fui avanzando lentamente,
presionando tus muslos cada vez más fuerte,
el algodón fue subiendo y rosando cada centímetro de tu piel,
hasta llegar al monte de venus.
Finamente cubierto por un jardín recién cortado,
los filamentos del césped ondulaban suavemente de un lado a otro
según el antojo de los dedos que se movían de manera circular cual si fuera el viento,
la temperatura fue incrementando como el calorque provenía en medio de nosotros,
tus labios acalorados se rosaban infinitamente con mi sexo,
de tus labios emanaba una exquisita y cálida sustancia cristalina.
Que se impregnaba y se entremezclaba con el furor del momento y nuestros cuerpos
simples y llanos se mecían como el oleaje atraía nuestras manos con súbita fuerza de gravedad
para tocar cada célula de piel desnuda entre ambos cuerpos...
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